domingo, 4 de octubre de 2009

Señalan ausencia de cambios con nuevo gobierno panameño

Panamá, 4 oct (PL) El Partido Alternativa Popular (PAP) de Panamá, fuerza política en formación, señaló hoy la ausencia de cambios con la llegada al poder del nuevo gobierno y el próximo arribo a los primeros 100 días de gestión.

Según la organización, están pendientes mejoras en temas como la seguridad, el elevado costo de la canasta básica, salarios, educación, transporte y salud pública.

Las reformas tributarias implementadas, añadió el PAP, afectan más a la clase media que a los verdaderos oligarcas, además de que la rebaja en los aranceles de importación a varios rubros golpea a productores y ganaderos del país.

El único programa social que puede presentar el actual gobierno como un logro nuevo es el del bono de 100 dólares mensuales a los adultos mayores de 70 años carentes de jubilación.

Sin embargo, esa iniciativa contrasta con la paralización de varios de los principales programas del Ministerio de Desarrollo Social, entre ellos la Red de Oportunidades.

En materia de política exterior, el partido cuestionó la posición respecto a la situación en Honduras cuando se señaló la posibilidad de reconocer el resultado de unas elecciones sin condicionarlas a la restitución del presidente constitucional de ese país, Manuel Zelaya.

Unido a ello, está el propósito de retirar a Panamá del Parlamento Centroamericano (PARLACEN) y el anuncio sobre la instalación de dos estaciones navales en el país bajo un acuerdo de cooperación internacional.

El PAP adelanta acciones para su registro oficial como partido político, lo cual requiere una cifra de adherentes equivalente al cuatro por ciento de los votos válidos emitidos en los comicios del 3 de mayo.

lma/mem

sábado, 3 de octubre de 2009

LA REPRESION CONTRA LA RESISTENCIA INDIGENA NASO

Huelga de hambre y manifestantes Nasos arrestados

Un total de 10 personas que participaban en la protesta pacífica, contra la destrucción de comunidades del pueblo naso en la provincia de Bocas del Toro, fueron detenidas a las 2am del sábado, 3 de octubre de 2009.

Los arrestos se produjeron en la Plaza Catedral de la ciudad de Panamá donde las protestantes estaban desde hace seis meses. Entre los detenidos hay 8 indígenas naso y dos indígenas ngobe. Fueron acusados por desacato, según una autoridad que estaba acompañada por unas 40 unidades de la Policía Nacional.

La autoridad esperó que los medios de comunicación se retiraran de la Plaza Catedral para efectuar el desalojo. Los protestantes trataban de descansar encadenados a los bancos del gacebo en la Plaza cuando fueron sorprendidos por la autoridad.

La Policía detuvo a varios resistentes que no estaban en el gacebo de la Plaza ni estaban encadenados. Los agentes rasgaron las pancartas.

Entre los detenidos se destacan los dirigentes naso Eliseo Vargas y Lucho Gamarra. También fueron detenidos dos indígenas ngobe que se habían incorporado en solidaridad desde la caminata de la Movilización Nacional Indígena, Campesina y Popular.

“Llamamos a todos los ciudadanos solidarios a unirse el sábado a la toma del gacebo de la Plaza Catedral en el que trataremos de sustituir a los compañeros naso detenidos y reprimidos”, dice un comunicado aparecido en internet.

Según la misma fuente, los detenidos “están en un cuarto no aislado de los presos comunes en una subestación de Policía del corregimiento de El Chorrillo. No hay colchones, ni condiciones higiénicas, tampoco se les facilitan alimentos. Según se informó, los agentes custodios no han abusado físicamente de los detenidos. Pero no hay condiciones que garanticen la seguridad ni los derechos fundamentales de los detenidos.


HUELGA DE HAMBRE
Como respuesta a la represión sufrida contra la resistencia naso, en la tarde del 3 de octubre un grupo de indigenas y ecologistas se han declarado en huelga de hambre en plaza Catedral para denunciar las medidas represivas del gobierno y su intención expresa a través del Ministerio Gobierno y Política Indigenista de fragmentar el territorio tradicional Naso y negar la autonomía para favorecer los intereses de la empresa Ganadera Bocas y transnacionales que vienen proyectando centrales hidroeléctricas en la zona.

Textos: Marco Gandesegui
Mesa de Redacción

LA DIRECCIÓN POLÍTICA DEL GOBIERNO DE MARTINELLI


OPINION CRITICA


Por Ángel T. Valdés M.




Si algo ha caracterizado al gobierno de Martinelli, además del “show” mediático de perseguir a malos empresarios, es que no ha dudado, tanto en el ámbito nacional como internacional, en presentarse como un gobierno de derecha decidido a detener la vertiginosa inclinación del “péndulo ideológico” hacia la izquierda en América Latina.

La coyuntura que le ha brindado el desastroso gobierno del PRD a Martinelli, proyecta a su gobierno como algo diferente, un gobierno capaz de enderezar entuertos y demostrar que un Estado dirigido por “empresarios exitosos” es la mejor alternativa para el pueblo.

Adalides de la justicia y legionarios anticorrupción, sus tropas seleccionadas de los “mejores panameños” se pasean, espada derecha en mano, por todos los ministerios e instituciones dispuestos a exterminar cualquier vestigio de podredumbre y corrupción del gobierno pasado. Estas acciones y actitudes han sido bien acogidas por diferentes sectores de la sociedad, hastiadas de tanta inmoralidad y favoritismos a sectores políticos determinados.

De esta manera, Martinelli se ha ganado la aprobación de los medios de comunicación, sectores empresariales, la Iglesia Católica y organizaciones afines o financiadas por los Estados Unidos. Con esta carta de presentación, se ha convertido en una alternativa de derecha para la región donde gobiernos neoliberales y conservadores han sucumbido producto de una agotada democracia elitista, de sus ambiciones y políticas corruptas, dándole paso a nuevas formas de organización popular y otros modelos de gobierno como los que se desarrollan en Venezuela, Bolivia y Ecuador.

El afán del actual gobierno es presentar la corrupción que impera en nuestra sociedad, como producto de la mala actuación de los gobernantes del PRD y de los viejos partidos oligarcas, y no como una consecuencia del propio sistema, por lo que ésta se puede erradicar con un buen gobierno dirigido por personas “honestas y capaces”. En estos primeros meses se ha querido vender esta ilusión, pero las denuncias de malos manejos e ilegalidades, no se han hecho esperar, comprobándose de esta forma, que por muy disfrazados de honestos que se nos presenten estos “nuevos políticos”, todos provienen de una misma matriz.

Es comprensible entonces, que cada vez que el gobierno lo necesita, los medios de comunicación nos hacen recordar aquellas imágenes emblemáticas, donde el legislador Afú con dos fajos de billetes, cual saetas listas para ser empulgadas, amenazaba con herir mortalmente el honor de sus otros copartidarios del PRD. El CEMIS, paradigma de la corrupción de los Poderes del Estado, está allí como un fantasma permanente para intimidar o acallar a quien ose agitar la ciénega donde cohabita la “clase política” del país.

Así, en estos primeros meses el gobierno del cambio ha querido enderezar lo que mal se ha hecho, sin importarle la forma como se hace, aún siguiendo los mismos procedimientos corruptos como las contrataciones directas, o ilegalidades como las que se han producido en la Asamblea de Diputados, la Alcaldía de Panamá, la Caja de Seguro Social y otras instituciones. Poco a poco y más temprano de lo esperado, al gobierno de Martinelli se le caído la careta y se descubre como más de lo mismo, con el agravante de que esta vez entran millonarios para salir más millonarios.

La orientación política y socioeconómica del gobierno, fue claramente definida en el discurso pronunciado por Martinelli en la ONU, donde se formuló como un futuro promisorio que Panamá se convertirá en el Dubai de América. Aunque la riqueza de Dubai, se ha basado en el petróleo, hoy su fuerte es el sistema financiero, el negocio inmobiliario y la industria de la construcción con sus mega proyectos. Allí se levantan lujosos rascacielos creados por la mano de obra barata de trabajadores provenientes de la India y Pakistán, quienes viven hacinados en condiciones de miseria, como esclavos, situación que ha sido denunciada por diversas organizaciones de Derechos Humanos. No queremos el desarrollo de nuestro país basado en esas condiciones, producto de la explotación y sangre de otros seres humanos, por lo que tememos que la visión del presidente sea convertirse en un nuevo Sheik (Emir) latinoamericano, dócil y ferviente seguidor de la política de Estados Unidos.

Con esta percepción del país y del mundo por parte de quien está al mando del Estado, será muy difícil enfrentar los grandes problemas que la crisis económica mundial ha generado y para los cuales no se avizoran soluciones reales y próximas. Más neoliberalismo y más rescate financiero a los grandes bancos es la solución capitalista, eso nos sumergirá en burbujas económicas mucho más grandes y peligrosas que la burbuja que estalló hace más de un año. El despilfarro de los recursos energéticos, el cambio climático, la lucha por adquirir fuentes de energía y agua, van a provocar grandes calamidades y confrontaciones entre naciones, si no se hace un alto en la forma de producir y consumir que el sistema capitalista ha impuesto.

El gobierno actual, ni siquiera se ha trazado un plan de desarrollo económico y social que contemple esta realidad que afecta a todo el mundo. Su política netamente empresarial, sólo se centra en crear el clima de un país abierto y favorable para hacer negocios, su reciente viaje a Europa y su corte de empresarios demuestra a quienes beneficiarán las políticas económicas del gobierno.

Estos cinco años de gobierno empresarial, a todas luces se nos presentan como nefastos para las aspiraciones de los más humildes. En estos últimos meses se ha producido un aumento en el desempleo y se ha encarecido la canasta básica del panameño, contrario a la falsa esperanza electoral que vendieron los partidos políticos que hoy gobiernan. Esta situación para el movimiento popular es un reto, pues se deben crear alternativas de poder para poder enfrentar las situaciones adversas que se avecinan, para que en el futuro próximo no nos dejemos engañar con la falsa democracia electorera, que se aprovecha cada cinco años, de la desorganización y miseria de nuestro pueblo.